Bienvenidos al Departamento de Atención a Plegarias

Esta empresa no funciona pero es muy creativa. Desde los albores de la humanidad este departamento ha contado siempre con un personal bastante escaso, quizás porque nunca estuvo previsto un número tan elevado de población mundial. Desde hace unos 1.000 años, Dios es un todopoderoso algo apagado y muestra un semblante más bien triste. Atrás quedaron aquellos tiempos en los que se invocaba su nombre y regía el devenir de los pueblos a través de su sucursal en la tierra: Ecclesia Enterprise. Una inversión demasiada elevada para los resultados obtenidos. Quizás uno de los principales motivos para querer echar la baraja y cerrar el negocio.

La cuestión es que en un arrebato de liderazgo, el jefe de departamento le echó un órdago al gran jefe, ya fuera para evitar la destrucción del planeta ya para evitar un gran ERE en la empresa. De una u otra manera, lo evidente es que se nos han concedido 178 días para bordear, circunvalar, orillar, esquivar, soslayar, escaparse, rehuir o evitar esta catástrofe. ¿Seremos capaces de lograrlo?

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El Departamento de Atención a Plegarias tiene como objetivo responder a las plegarias diarias de la población mundial. A lo largo del día recibimos billones de ellas, pero solo tenemos tiempo para responder a unas 10 o 15 por día. No es fácil crear discretos fenómenos naturales para que estas necesidades se lleven a cabo. Evidentemente, está totalmente prohibido vulnerar las leyes físicas de la naturaleza. La población, ciertamente, no está preparada para los milagros, pero no por eso debe dejar de confiar en ellos. 

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Aquellas plegarias de NIVEL 4 son las que consideramos "impos", o sea, imposibles de cumplir y son las que directamente son enviadas al presidente, ya que él es el único que tiene la potestad para llevarlas a cabo. El problema es que lleva unos 1.000 años de retraso con ellas. No hay nada peor que un Dios creador con depresión.